Tipo de psicoterapia que está dirigida a ayudar a las parejas a resolver conflictos, mejorar la comunicación y fortalecer su relación. Este enfoque terapéutico se centra en hacer conscientes los problemas que afectan la dinámica de la pareja (relacionales, personales, sociales, contextuales...), y busca potenciar y desarrollar sus recursos para mejorar su bienestar emocional, tomando medidas respecto a los factores desencadenantes de las dificultades de la pareja

Psicoterapia de pareja

¿En qué puede ayudarte la terapia de pareja?

Síntomas

Dificultades relacionales

  • Signos/síntomas/trastornos del estado de ánimo (ansiedad, depresión, fobias específicas, hipocondriasis, claustrofobia, ansiedad por separación, TOC...)

  • Trastornos de la Conducta Alimentaria (anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, atracón, ortorexia, vigorexia...)

  • Trastorno de estrés postraumático (TEPT)

  • Uso y abuso de sustancias (tabaco, alcohol, cannabis...)

  • Trastornos del sueño

  • Trastorno por estrés agudo

  • Dificultades en la comunicación 

  • Dificultades en la expresión emocional y de necesidades

  • Discusiones frecuentes o discusiones que escalan en agresividad

  • Sentimiento de incomprensión

  • Dificultades para establecer límites

  • Dificultades en llegar a acuerdos

  • Dificultades para solucionar los problemas

  • Miedo al compromiso o a la intimidad

  • Desconfianza 

  • Celos disfuncionales

  • Dependencia emocional

  • Sanación de una infidelidad

  • Reconstrucción de la confianza

  • Distanciamiento emocional

  • Problemas desencadenados a causa de los roles y responsabilidades de cada uno (tareas domésticas, crianza de los hijos, expectativas...)

  • Interferencias de la familia extensa en la relación de pareja

  • Dificultades desencadenadas por diferencias en las expectativas de futuro, valores y objetivos compartidos.

  • Falta de autonomía personal

  • Crisis vitales que afectan negativamente a la relación de pareja (perdida de seres queridos, cambios laborales o mudanzas, enfermedades, problemas de salud...)

  • Falta de intimidad afectivo y/o sexual

  • Recuperación de la complicidad y del cariño

  • Dificultades sexuales

  • Desacuerdos en la crianza de los hijos

  • Incertidumbre sobre si seguir o no una relación